Te Anau, Kingston, Lake Wakatipu, Queenstown

Últimamente estoy un poco holgazán por las mañanas y he retrasado dos horas la hora de levantarme. No os creáis que es tarde, son las 8 de la mañana. El día ha amanecido totalmente despejado. Cual era el plan para hoy? Pues sabíamos que cogeríamos camino a Queenstown pero poco más. También sabíamos que no llegaríamos a la ciudad de los deportes extremos hoy pues nos han informado que está prohibido aparcar en 10 kilómetros a la redonda bajo multa de 500 dólares. 

Tras desayunar y hacer las tareas domésticas, necesitábamos conectarnos a internet por lo que fuimos a la biblioteca de Te Anau. Tiene conexión wifi ilimitada, así como equipos propios para los que hay que pedir cita. Lo único que no dejan es que utilices los enchufes para cargar tus baterías salvo las del portátil, pero bueno allí más de una persona estaba con el cargador medio oculto en la mochila y ésta apoyada delante de los enchufes. La biblioteca la abren hasta los domingos, con horario reducido, pero algo es algo. Si algunos tomaran ejemplo...

Luego tocaba seguir mamoneando por Te Anau, ciudad que nos ha encantado incluso para vivir. Es una ciudad pequeñita, 1800 habitantes, con supermercado, cine, varias tiendas de montaña (lógico, teniendo en cuenta su ubicación y que alrededor suyo hay 4 great walks), dos gasolineras, miniaeropuerto y demás tiendas. Vamos, todo un pueblo. No os creáis que hay muchas ciudades/pueblos neozelandeses de ese (o mayor) tamaño con tantos servicios. Pero además de estar perfectamente equipada para lo que queremos en NZ, el ambiente que se respira es muy relajante (incluso a la gente trabajando un domingo se le veía muy desestresada). Además, sin duda su ubicación es perfecta para mi gusto. Ahora bien, en invierno tiene que hacer un frío de coj....

Nuestro plan matutino además de conectarnos a internet se iba a enfocar a preguntar por la existencia de trabajos en la ciudad y dejar nuestros datos pero no ha hecho falta ya que en la biblioteca he podido escuchar a un argentino que la cosa estaba fatal, que sólo contratan a kiwis, etc. Así que, muy a nuestro pesar, pasaremos página con Te Anau. No sé si te volveremos a ver. Espero que sí.

Habìa que cambiar nuestro pensamiento y mirada hacia el siguiente destino: Queenstown, la ciudad de la adrenalina. A 177 kilómetros de Te Anau, primero por la carretera 94 y luego por la 6. Las ciudades del camino no aparecen en ninguna guía, blog, foro, etc. La verdad que no tienen nada que ver. Las vistas de los alrededores son otra cosa. Si bien no son los mejores escenarios de NZ, sí son los que me había imaginado yo. Grandes valles, rodeados de picos nevados (Eyre Mountains por el oeste y Hector Mountains por el este), con largos campos de hierba cubiertos de ovejas. Pues exactamente eso es lo que hemos encontrado en el camino hasta que llegamos a Kingston, que es la ciudad ubicada en el extremo oriental del lago Wakatipu, donde están asentadas también Queenstown y Glenorchy. Kingston es una pequeña localidad que tiene pinta de ser un destino de veraneo por su ubicación y el tipo de casas. Tiene una gasolinera de prepago (únicamente con tarjeta y hay que hacer caso a las instrucciones del panel ubicado encima de la máquina, no las instrucciones de la maquina;es un pelín más cara, pero no mucho) y nada más.

Como he dicho antes, en Queenstown está complicado el tema de camping libre, así que nos dijimos: “mañana nos acercamos a Queenstown y esta tarde la dedicamos a leer”. Acuerdo mutuo en menos de 1 segundo. Tras pasar Kingston en el mapa nos aparecían marcadas tres áreas de descanso. La primera de ellas, nefasta. La segunda, ideal. Toda para nosotros con vistas al lago, a Kingston, a las montañas y con una playita de piedras donde echarse una siesta. Además, estamos rodeados de tuis que no han parado de cantar en toda la tarde. Cantar o analizar, ya que como nos dijo ayer Rafa, el cantar de los tuis se parece a R2D2 cuando hablaba.

Esta noche tocará tumbarse en la playita con dos mantas y los sacos si hace falta a ver las estrellas, que va a haber unas cuantas pero también se prevé frío, 3 grados concretamente, según la previsión emitida por la radio. Hoy hay que ponerse los calzoncillos largos.

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